› Por sus propiedades antioxidantes (vitaminas C y E), es un excelente alimento anti envejecimiento.
› Gracias a su contenido en ácido fólico, ayuda a fortalecer las defensas del organismo. Y contribuye a la formación de anticuerpos, y la producción y fortalecimiento de glóbulos rojos y blancos.
› Por su abundancia de ácido fólico o folatos, su consumo resulta muy adecuado en mujeres embarazadas para prevenir la espina bífida; alteración en el desarrollo del sistema nervioso del feto.
› La vitamina C interviene en la formación del colágeno, los huesos y los dientes.
› También la vitamina C favorece la absorción del hierro de los alimentos, por lo que mejora o previene la anemia ferropénica y mejora la resistencia a las infecciones.
› Las fresas son grandes aliadas contra la arteriosclerosis por su alto contenido en fibra, que disminuye la absorción de grasa en las arterias y con ello, la posibilidad de que se pegue a estas.
› Los antioxidantes pueden bloquear los radicales libres que modifican el llamado mal colesterol, contribuyendo a reducir el riesgo cardiovascular y cerebro vascular.
› Muy recomendadas en lactancia, tabaquismo, empleo de ciertos medicamentos, bajada de defensas, estrés o enfermedades inflamatorias crónicas.
› Por su elevado contenido de potasio y bajo en sodio, resultan muy adecuadas para aquellas personas que sufren de hipertensión arterial o afecciones de los vasos sanguíneos y el corazón.
› Es baja en calorías, lo que la hace muy adecuada para ayudar a controlar nuestro peso.
› Las hojas y las raíces de las fresas poseen componentes diuréticos. Si tomamos la infusión de las hojas y las raíces tres veces al día, nos ayudaran a prevenir o eliminar el exceso de ácido único, por lo que serán muy interesantes en el tratamiento de gota , obesidad, artritis, hipertensión arterial u otras enfermedades asociadas a la retención de líquidos.
› Por sus cualidades como laxante, diurético y astringente, hace que las fresas sean un alimento ideal para personas con problemas reumáticos.
› Inflamaciones intestinales.
› Las hojas en infusión y las raíces en decocción, son un buen remedio contra la diarrea o la disentería.
› Las infusiones de hojas secas son muy astringentes y pueden utilizarse para curar las llagas de la boca o aftas.
› El zumo de fresas tiene cualidades antibacterianas y vulnerarias. Por lo que aplicado sobre la piel actúa aclarando las manchas o secando antiestéticos granos.
› En recientes estudios, se ha comprobado que tomar fresas protege de los daños causados por los rayos UVA en células de la piel; mostrando una actividad fotoprotectora y benéfica contra el cáncer de piel. y otras enfermedades inflamatorias y degenerativas de la piel.
› Consumir fresas con asiduidad, aporta reducción del estrés, y menos dolor durante los ciclos menstruales